El proyecto ‘Ejercicios mínimos para un jardín de invierno’ estudia la relación entre la representación del salvaje en el s. XIX y la historia colonial en el pensamiento estético y político contemporáneo. Se compone de diversos ejercicios, realizados en fotografía digital, analógica, fotocopias, fotograbado, grabado y técnicas experimentales que mezclan estos procesos, además de algunos textos.
Cada ejercicio representa una interpretación del mismo tríptico. El proyecto toma como base un tríptico antropológico del s. XIX, realizado en el Jardín de Aclimatación de París por Pierre Petit el 12 de octubre de 1888, durante las exhibiciones etnográficas.
La imagen fue encontrada por azar en una pequeña caja negra rotulada “Chili”, en los archivos antropológicos del Museo du quai Branly, en París, en 2014. Se compone de tres fotografías de tres mujeres desnudas mientras eran exhibidas en el Jardín de Aclimatación de París.
De las tres imágenes, dos siguen las reglas de la fotografía antropológica del s. XIX: las mujeres están desnudas, erguidas, brazos a los costados, mirada al lente. Todo estaba dispuesto para hacer de estas imágenes un documento para la ciencia, salvo por un detalle: el fondo de palmeras. Y es que las palmeras son el signo del exterior.
De hecho, es el timbre que lleva la imagen el que muestra que la escena se desarrolla en París. Es el sello el que muestra que estas mujeres no están en la selva sino en la ciudad; que, a pesar de las apariencias, se trata de una imagen de ciudad. Sin embargo, si las dos primeras imágenes siguen las reglas de la antropología física, con la última, en cambio, ya no se trata del retrato antropológico porque lo visible es otra alteridad. Las tres Gracias.
Es bastante probable que ésta sea la primera fotografía de las Cárites. Pero más significativo es esto: es la primera imagen –y quizá la única– que representa a las tres Gracias mediante tres mujeres negras.