Inés Molina Navea, mención especial en Arles 2023 por ‘Ejercicios mínimos para un jardín de invierno’
‘Ejercicios mínimos para un jardín de invierno, n°8’, el primer fotolibro de la artista, investigadora y Doctora en filosofía Inés Molina Navea (Valparaíso, Chile, 1982), ha obtenido este mes de julio de 2023 la mención de honor (mention spéciale) como libro de autor en el festival de fotografía Rencontres d’Arles 2023.
El fotolibro, que intenta pensar la obra de arte en relación con el hecho histórico, fue finalista de la segunda edición del Premio Eloi Jimeno y ha podido llevarse a cabo gracias a que la autora ganó la VIII Beca Fotográfica de Foto Torroella, de carácter bianual, cuyo jurado estuvo formado por la curadora Natasha Christia, el fotógrafo Eugeni Gay Marin y el artista y docente Jordi Guillumet.
El diseño del libro ‘Ejercicios mínimos para un jardín de invierno, n°8’ de Inés Molina Navea ha sido obra de Juanjo Justicia (Underbau), la edición la firman Alex Llovet y Josep Maria de Llobet (Ediciones Posibles) y la impresión ha tenido lugar en Artes Gráficas Palermo. La primera tirada ha sido de 150 ejemplares.
'Ejercicios mínimos para un jardín de invierno', el proyecto
El proyecto ‘Ejercicios mínimos para un jardín de invierno’ estudia la relación entre la representación del salvaje en el s. XIX y la historia colonial en el pensamiento estético y político contemporáneo. Se compone de diversos ejercicios, realizados en fotografía digital, analógica, fotocopias, fotograbado, grabado y técnicas experimentales que mezclan estos procesos, además de algunos textos.
Cada ejercicio representa una interpretación del mismo tríptico. El proyecto toma como base un tríptico antropológico del s. XIX, realizado en el Jardín de Aclimatación de París por Pierre Petit el 12 de octubre de 1888, durante las exhibiciones etnográficas.
La imagen fue encontrada por azar en una pequeña caja negra rotulada “Chili”, en los archivos antropológicos del Museo du quai Branly, en París, en 2014. Se compone de tres fotografías de tres mujeres desnudas mientras eran exhibidas en el Jardín de Aclimatación de París.
De las tres imágenes, dos siguen las reglas de la fotografía antropológica del s. XIX: las mujeres están desnudas, erguidas, brazos a los costados, mirada al lente. Todo estaba dispuesto para hacer de estas imágenes un documento para la ciencia, salvo por un detalle: el fondo de palmeras. Y es que las palmeras son el signo del exterior.
De hecho, es el timbre que lleva la imagen el que muestra que la escena se desarrolla en París. Es el sello el que muestra que estas mujeres no están en la selva sino en la ciudad; que, a pesar de las apariencias, se trata de una imagen de ciudad. Sin embargo, si las dos primeras imágenes siguen las reglas de la antropología física, con la última, en cambio, ya no se trata del retrato antropológico porque lo visible es otra alteridad. Las tres Gracias.
Es bastante probable que ésta sea la primera fotografía de las Cárites. Pero más significativo es esto: es la primera imagen –y quizá la única– que representa a las tres Gracias mediante tres mujeres negras.
Ejercicios mínimos para un Jardín de invierno, la exposición
Antes de ser un libro, la obra se mostró como una exposición que buscaba pensar la relación entre el instante de legibilidad de la obra de arte y la comprensión de la historia.
La muestra se compone de diversos ejercicios, realizados en fotografía digital, analógica, fotocopias, fotograbado, grabado y técnicas experimentales que mezclan estos procesos. Forman variaciones sobre un tríptico antropológico y, en particular, sobre las múltiples lecturas posibles de una fotografía.
Este proyecto artístico y filosófico es el fruto de la residencia artística que Inés Molina Navea realizó en el marco del programa Residencias en la Cité internationale des arts de París gracias al apoyo del Instituto Francés de Chile.